Qué ver en Liérganes
Considerado Conjunto Histórico Artístico y uno de los pueblos más bonitos de España, sigue leyendo y descubre qué ver en Liérganes.
Hablar de Liérganes es hablar de la leyenda del Hombre-Pez, pero también de sus casonas y palacetes, su balneario y por supuesto su Puente Romano sobre el río Miera.
Qué hacer en Liérganes
Puente Romano
También llamado Puente Mayor, fue uno de los primeros puentes de piedra construidos en Cantabria en la segunda mitad del siglo XVI.
Al fondo se divisan las elevaciones Marimón y Cotillamón, conocidas como “Las Tetas de Liérganes”, en conjunto con el puente conforman la imagen más icónica de la localidad.
De la construcción se encargó el arquitecto Bartolomé de Hermosa, siendo la inauguración oficial en el año 1606.
A su lado se puede ver la escultura de bronce del Hombre-Pez, una figura destacada de la mitología cántabra.
La leyenda cuenta que se trataba de Francisco de la Vega Casar, vecino de Liérganes que se lanzó a nadar con unos amigos al río Miera y desapareció aguas abajo.
No se tuvo noticias de él hasta cinco años más tarde, cuando unos pescadores de la Bahía de Cádiz encontraron un extraño ser humano con algunas características únicas de los peces que sólo repetía la palabra Liérganes.
Tras mucho investigar descubrieron que podría tratarse del joven desaparecido años atrás en esta pequeña localidad cántabra, un fraile le trajo de vuelta y él sólo encontró el camino de vuelta a su casa.
Precisamente junto al Puente Romano se ha instalado el Centro de Interpretación del Hombre-Pez, en un antiguo molino harinero que estuvo en funcionamiento hasta el siglo XIX.
Edificios civiles
Callejeando por el barrio de El Mercadillo se puede ver con claridad porque Liérganes es Conjunto Histórico Artístico y uno de los pueblos más bonitos de España.
Se trata de la parte más antigua de la localidad, salpicada por casonas populares adornadas con coloridas flores.
Muchas de ellas se distribuyen alrededor de la Plaza del Marqués de Valdecillas, dominada por la Casa de los Cañones, con sus cañones de guerra flanqueando el conjunto.
También recibe el nombre de Casa de los Cantolla, debido a que fue construida a principios del siglo XVIII por Domingo de la Cantolla Miera, Secretario de la Inquisición General.
Además está la Casa de Cuesta Mercadillo, con su escudo de armas haciendo esquina.
En dirección a la Plaza de Vitote no te pierdas la Casa Rañada Portilla, construidas por Juan de la Rañada y Pascual de la Portilla, respectivamente.
Al lado contrario se ubica la Casa Langre, una de las primeras de estilo clasicista; así como la Casa Setién, una de las más antiguas de Liérganes.
Ya en el barrio de La Rañada se puede ver el Palacio de Cuesta Mercadillo o Palacio de La Rañada, declarado Bien de Interés Cultural.
Muy cerca se ubica la Casona de Cárcova Rubalcaba, construida por José Domingo de la Cárcova Rubalcaba en el siglo XVIII.
Por su parte en el barrio La Costera está la Casa del Intendente Riaño, erigida por Juan Antonio Riaño y Bárcena, Intendente de Guanajuato.
Pero sin duda el monumento civil más destacado de Liérganes es el Palacio de Elsedo, ubicado en Pámanes.
Se trata de un palacio rural del siglo XVIII construido por Francisco de Hermosa y Revilla, primer conde de Torre Hermosa.
Hoy en día alberga el Museo de Arte Contemporáneo, con una de las mejores colecciones privadas del arte español del siglo XX.
Edificios religiosos
También muy variada es la muestra de arquitectura religiosa de Liérganes, destacando la Iglesia de San Pedro Ad Víncula, declara Bien de Interés Cultural.
Ubicado al final del Paseo de Velasco, es un monumental templo renacentista del siglo XVIII con reminiscencias góticas y románicas.
Más antigua es la Iglesia de San Sebastián y San Pantaleón, construida entre los siglos XIV y XV.
Volviendo al céntrico barrio de El Mercadillo se puede visitar la Capilla del Carmen junto al Colegio de la Niñas, con su bello retablo churrigueresco.
Por su parte en el barrio de La Rañada está la Ermita del Santo Cristo del Humilladero, de estilo clasicista de finales del siglo XVI.
Balneario de Liérganes
El lugar ideal para relajarse después de un largo día de turismo, un balneario centenario del que se tiene constancia desde el siglo XVII.
Regado por las aguas de la Fuente Santa, su período de mayor esplendor llegó a principios del siglo XX, cuando era visitado por el rey Alfonso XIII.
Sus aguas son sulfuradas, cálcicas, sulfatadas, de mineralización alta, con una temperatura que no llega a los 20ºC.
Cuentan con propiedades antisépticas, broncodilatadoras, antiflogísticas, queratolíticas y relajantes.
Ecomuseo Fluviarium
Oficialmente su nombre es Ecomuseo Fluviarium de la Montaña y Cuencas Fluviales Pasiegas, gestionado por la Fundación Naturaleza y Hombre.
Su objetivo es dar a conocer el importante patrimonio natural y etnológico de los Valles Pasiegos, desde las altas montañas hasta las cuencas fluviales.
Historia de Liérganes
Aunque hay indicios de asentamientos humanos en la región desde la Edad de Piedra, la historia documentada oficial empieza en el año 816.
Por aquel entonces se tiene constancia de la existencia del Monasterio de San Martín de Liérganes, actualmente desaparecido.
En principio se trataba de un pequeño pueblo de labradores, organizados bajo un sistema de behetrías, según el cual podían elegir a su señor y pactar las condiciones laborales y el pago de tributos.
El siglo XVII trajo un período de gran esplendor, en primer lugar la implantación del cultivo de maíz.
En segundo lugar por la llegada de Jean Curtius, industrial belga que instaló una fábrica de artillería, municiones y piezas de hierro colado, la primera de la que se tiene constancia en España.
También en ese siglo se inauguró el Balneario de Liérganes, con aguas medicinales provenientes de la Fuente Santa.
Precisamente fue el balneario el encargado de impulsar el crecimiento en los siglos posteriores, transformándose en una ciudad de veraneo visitada incluso por el rey Alfonso XIII.
Gracias a eso se construyó una línea de ferrocarril conectada directamente con Santander, donde veraneaba la clase alta de la época.
Hoy en día Liérganes vive principalmente del turismo, impulsado desde su declaración como Conjunto Histórico Artístico y uno de los pueblos más bonitos de España.
Fiestas de Liérganes
Las fiestas patronales son en honor de San Pantaleón y San Pedruco, alrededor del que se extienden desde el 26 de julio hasta el 1 de agosto.
Llama la atención es Festival del Chorizo y el Vino de Rioja, celebrado en honor del hermanamiento de Liérganes con la localidad riojana de Baños del Río Tobías.
Además a lo largo del año se celebran mercados de productos tradicionales pasiegos y mercados medievales.
Comer en Liérganes
La ganadería pasiega es la base de la cocina tradicional de Liérganes, con carnes de excelente calidad de vacuno y de ovino.
Pero si prefieres pescado, tienes la opción de comer trucha, obtenidas directamente de las limpias aguas del río Miera.
Entres los productos gastronómicos tradicionales destaca el queso nata de Cantabria, con Denominación de Origen Protegida.
Pero son los dulces y postres los que se llevan todo el protagonismo, con dos especialidades locales: los “Sacristanes” y los “Corazones”.
Los “Sacristanes” son unos lazos de hojaldre, por su parte los “Corazones” son pastas con sabor a canela.
Además es muy típico merendar chocolate con churros, siendo agosto el mes por excelencia para consumirlos.
En las pastelerías de la localidad también puedes encontrar las “Tetas de Liérganes”, las Rocas del río Miera o las Losas del Valle de Miera.
Finalmente no pueden faltar los sobaos y la quesada pasiega, dos postres típicos de los Valles Pasiegos.
Cómo llegar a Liérganes
Hay muy buena conexión para llegar a Liérganes desde Santander en transporte público.
Los trenes de Feve enlazan la pequeña localidad pasiega con la capital de Cantabria en 45 minutos.
Hay salidas cada hora desde las 06:14 a hasta las 21:14 entre semana y desde las 07:14 horas los fines de semana.
El billete sencillo cuesta 2,65€, el de ida y vuelta 4,90€.
Del trayecto en autobús se encarga la compañía Alsa, con cuatro salidas diarias, a las 09:30, 12:00, 16:30 y 18:30 horas.
El billete sencillo cuesta 2,50€, el de ida y vuelta son 4,75€.
Por última está la opción de viajar en transporte particular, muy recomendable si quieres recorrer otros pueblos de la región.
Si necesitas alquilar un coche, con el buscador de Rentalcars encontrarás los precios más baratos entre cientos de webs de reservas.
Por la localidad pasa la carretera CA-260, conectada a la A-8 a través de la CA-160, llega hasta el Portillo de Lunada pasando por San Roque de Riomiera.
Hay un gran aparcamiento público junto a la Estación de Trenes, con espacio también para caravanas y autocaravanas.