Qué ver en Orbaneja del Castillo
Con uno de los conjuntos de arquitectura popular mejor conservados de Burgos, sigue leyendo y descubre qué ver en Orbaneja del Castillo.
Además llama la atención su entorno natural, ya que está enclavado entre las paredes del cañón del Ebro.
Por el centro de la villa discurre un arroyo que nace en una cueva y se precipita en una cascada de 25 metros de altura.
Visitar Orbaneja del Castillo
Cueva del Agua
Aunque escondida a los pies de una cornisa de piedra, la Cueva del Agua se lleva gran parte del protagonismo turístico.
Forma parte de uno de los complejos kársticos más importantes de la provincia de Burgos, junto con la Cueva del Níspero o la Cueva del Barbancho.
Además servir de refugio desde tiempos inmemoriales, de ella brotan las cristalinas aguas que dan de beber a la población.
El horario de visita es el siguiente: en verano, los fines de semana y festivos de 11:30 a 15:00 y de 16:00 a 19:30 horas.
La entrada cuesta 2€.
Cascada
Al principio el agua está encauzada en un tranquilo arroyo que atraviesa la población, pero pronto se precipita formando una espectacular cascada de más de 20 metros de altura.
Cuenta con un caudal permanente de 200 litros por segundo, pero durante la primavera aumenta considerablemente, atronando con su sonido toda la localidad.
Antiguamente la fuerza del agua era utilizada por cinco molinos harineros, de los que hoy en día se conservan algunos restos.
Tobas calcáreas
Las tobas calcáreas forman parte de esta estructura viva que va creciendo y avanzando año tras año, formando piscinas naturales de un intenso color azul verdoso.
Al igual que tiene gran importancia el complejo kárstico de Orbaneja del Castillo, las tobas calcáreas son las más importantes del Parque Natural de las Hoces del Alto Ebro y Rudrón.
Volviendo a la Cueva del Agua, su interior es accesible mediante visitas guiadas, destacando dos sifones de 120 y 80 metros de largo.
Arquitectura popular
Declarada Conjunto Histórico Artístico en 1993, el otro gran atractivo de Orbaneja del Castillo es su arquitectura popular.
Se trata de un conjunto de casas montañesas que se adaptan al escarpado terreno del cañón del río Ebro.
Para su construcción se utilizó la piedra toba tan abundante en la región.
No son de mucha altura, pero al estar ubicadas en empinadas cuestas, da la sensación de que estuvieran suspendidas.
La mayoría cuenta con solana de madera, desde las que sus propietarios disfrutan de las vistas panorámicas del entorno.
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Entre el caserío destaca la Casa Fuerte, erigida sobre un espigón rocoso.
Así como la Casa de los Canes, debe su nombre a los canecillos románicos que decoran su fachada.
Sin olvidar la Casa de los Pobres, construida como hospital en el siglo XVI.
Todo el conjunto se distribuye alrededor del arroyo que nace en la Cueva del Agua, formando una amplia plaza en el corazón de la localidad.
Un sendero lleva hasta una cornisa de piedra desde la que se divisan las mejores vistas del casco histórico y el entorno natural.
Estructuras kársticas
Un mar de tejados se extiende por la ladera del cañón del río Ebro, al otro lado hay un importante conjunto de estructuras kársticas.
Entre las caprichosas formas rocosas puedes buscar la silueta del continente africano o los dos camellos besándose.
Pero sobre todo da la sensación de ver un imponente conjunto defensivo.
Eras
Fuera están las Eras de Orbaneja del Castillo, chozas de piedra antiguamente utilizadas como refugio y granero.
De la arquitectura religiosa se conserva una iglesia parroquial, aunque es de origen románico, ha sido bastante reformada con el paso del tiempo.
Historia de Orbaneja del Castillo
En la Cueva del Azar se conservan pinturas rupestres que datan las primeras poblaciones de la zona en el Neolítico.
Por ese motivo fue declarada Bien de Interés Cultural.
También se han encontrado algunos restos de un castro prerromano, perdiendo su importancia tras las Guerras Cántabras.
En la Edad Media convivieron cristianos, judíos y musulmanes provenientes de Al-Andalus.
Los Caballeros Templarios instalaron el Convento y Hospital de San Albín, dando cobijo a los peregrinos que hacían una de las antiguas variantes del Camino de Santiago Francés.
Los Reyes Católicos le concedieron el título de villa, gozando desde entonces de una gran independencia.
Hasta que en 1976 fue incluida en el municipio Valle de Sedano.
En el siglo XX vivió una preocupante despoblación, hoy en día sólo conviven unos 50 vecinos.
Pero gracias al auge del turismo, cada fin de semana acoge a miles de personas.
Fiestas de Orbaneja del Castillo
Estas son las principales celebraciones populares:
- Día de Pentecostés: Fiesta de San Tirso.
- Primer domingo de agosto: Fiestas de Verano.
- 15 de agosto: Guerra de Agua.
Gastronomía de Orbaneja del Castillo
Su cocina es típicamente castellana, con elaboraciones contundentes que ayudan a combatir los fríos días de invierno.
Entre los primeros no puede faltar un plato de legumbres, pueden ser judías, fabada o garbanzos.
En los días de más calor se puede optar por una ensalada o un revuelto.
Entre los segundos no faltan chuletillas de cordero, solomillo de cerdo o entrecot de ternera.
Cómo llegar a Orbaneja del Castillo
Sólo hay un medio de transporte público para llegar a Orbaneja del Castillo.
Se trata de un autobús gestionado por Alsa que parte desde Burgos.
El viaje dura algo más de una hora y cuesta 6€.
Es más común llegar en transporte particular.
Siguiendo la carretera N-623 hay que desviarse hacia BU-643, en dirección Escalada, Orbaneja del Castillo, Polientes.
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En la propia carretera de acceso hay una serie de aparcamientos públicos, aunque durante el verano hay pocas plazas disponibles.
