Además de los monumentos y museos, las plazas y jardines de Salamanca son también una visita turística obligatoria.
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Plaza Mayor de Salamanca
Sin duda la Plaza Mayor es todo un símbolo de Salamanca, considerada además una de las más bellas y armónicas de España.
Fue declarada Monumento Nacional en 1935.
La construcción se llevó a cabo en la primera mitad del siglo XVIII, siguiendo el diseño del arquitecto Alberto de Churriguera.
Su estilo es churrigueresco, una variante más recargada del barroco.
En primer lugar se erigió el ala este, coronada por el Pabellón Real y decorada con los medallones de los reyes de España.
En ese primer período se construyó también el ala sur o fachada de San Martín.
Durante algunos años las obras se detuvieron por problemas con los propietarios de las viviendas circundantes.
La segunda fase constructiva se alargó desde 1750 hasta 1755, del proyecto se encargó el arquitecto Andrés García de Quiñones.
En este segundo período se añadió la fachada norte, coronada por el Ayuntamiento de Salamanca.
Así como el ala oeste, también conocida como fachada de Petrineros.
Además de los medallones de los reyes de España, la Plaza Mayor de Salamanca está decorada con los medallones de otros personajes que marcaron la historia del país y la ciudad.
Sin olvidar las cuatro esculturas alegóricas de la Casa Consistorial, representando la Agricultura, la Industria, la Música y la Poesía.
Finalmente todo el conjunto forma un cuadrilátero irregular, con una superficie de más de 6.000 metros cuadrados.
Sus soportales están sujetos mediante 88 arcos de medio punto, en ellos hay numerosos locales comerciales y gastronómicos.
Incluyendo el Café Novelty, el más antiguo de Salamanca.
Desde sus orígenes ha sido escenario de los principales eventos y celebraciones de la ciudad.
La colocación de la Mariseca en lo alto del Ayuntamiento de Salamanca marca actualmente el inicio de las Fiestas y Ferias de la Virgen de la Vega.
También acoge a finales de año la Nochevieja Universitaria.
Plaza del Concilio de Trento
Tras la Plaza Mayor, la Plaza del Concilio de Trento es la segunda plaza más hermosa de Salamanca, rodeada por algunos de los edificios religiosos más importantes de la ciudad.
El principal monumento que se alza en la Plaza del Concilio de Trento es el Convento de San Esteban, con su imponente fachada plateresca.
Por sus estancias han pasado numerosos personajes históricos, incluyendo a Cristóbal Colón o Santa Teresa de Ávila.
Pero desde aquí también se puede acceder al Convento de Santa María de Las Dueñas, conocido popularmente como Las Dueñas; así como al Palacio de Castellanos, convertido en hotel.
Importante zona de paso de viajeros durante años, hoy en día sigue siendo uno de los puntos turísticos imprescindibles de la ciudad.
Plaza de Anaya
Su ubicación estratégica entre las Catedrales de Salamanca y el Palacio de Anaya, la convierten en un punto de paso obligatorio para los visitantes de la ciudad.
Sus jardines ofrecen además una excepcional zona de descanso tras largas horas de ajetreado turismo.
A un lado de la Plaza de Anaya se ubica la Catedral Nueva de Salamanca, una de las últimas catedrales góticas construidas en España.
Concretamente aquí se alza la fachada norte, en su portada se puede ver la anacrónica figura de un astronauta en medio del resto de la decoración medieval.
Justo enfrente de ella está el Palacio de Anaya, anteriormente conocido como Colegio Mayor de San Bartolomé.
El edificio que hoy en día acoge la Facultad de Filología, es uno de los pocos de estilo neoclásico que se pueden ver en Salamanca.
Flanqueando el Palacio de Anaya, a la izquierda se ubica la Iglesia de San Sebastián, antigua capilla del colegio mayor y al derecha la Hospedería de Anaya, donde se alojaban los estudiantes con menores recursos económicos.
Todo el conjunto fue declarado Bien de Interés Cultural.
Huerto de Calixto y Melibea
Ubicado entre las Catedrales de Salamanca y el río Tormes, el Huerto de Calixto y Melibea es uno de los rincones más pintorescos y con mejores vistas de la ciudad.
Se construyó en el lugar donde supuestamente se desarrolla la Tragicomedia de Calixto y Melibea, obra literaria medieval también conocida como La Celestina.
Concretamente se dice que este fue el escenario elegido por Fernando Rojas para los encuentros furtivos de los amantes y su triste desenlace.
Hoy en día se ha convertido en un remanso de paz en medio del bullicio de la ciudad, muy frecuentado por parejas que quieren sellar su amor dejando un candado en el pozo de los deseos.
El Huerto de Calixto y Melibea se puede visitar desde las 10 de la mañana hasta el atardecer.
Campo de San Francisco
Se encuentra al norte del casco histórico, en una zona ocupada por numerosos conventos.
Precisamente el Campo de San Francisco ocupa el espacio donde anteriormente estaba la huerta del desaparecido Convento de San Francisco el Grande.
Se trata del primer parque público de Salamanca, comenzando a funcionar en la primera mitad del siglo XIX, tras haber plantado más de 600 álamos y haber traslado una fuente desde la cercana Plaza de Monterrey.
Entre sus puntos de interés destacan:
- Biblioteca Popular, abierta a principios del siglo XX, recientemente ha sido reinaugurada para celebrar el Día del Libro.
- Humilladero, donde todavía se puede ver cada Viernes Santo el Acto del Descendimiento.
- Escultura de San Francisco de Asís, obra de Venancio Blanco.
