Además de visitar los museos y monumentos, no te puedes ir de la ciudad sin descubrir alguno de los parques y jardines de Múnich.
Englischer Garten
Extendiéndose a lo largo de más de 4 kilómetros a orillas del río Isar, el Jardín Inglés de Múnich está considerado el parque público urbano más grande del mundo.
Es el principal punto de encuentro de los muniquenses en su tiempo libre, van a pasear, relajarse, tomar una cerveza o charlar con los amigos.
Incluso a patinar en invierno en el lago Kleinhesseloher o hasta a surfear en el canal Eisbach.
Se creó en 1789 por orden del duque Carlos Teodoro de Baviera.
En principio fue un espacio de esparcimiento para el ejército, pero en 1792 abrió sus puertas para todo el público.
Uno de los puntos más famosos del parque es la Torre China, con 25 metros de altura.
A sus pies se extiende uno de los Biergarten más grandes de la ciudad, cuenta con una terraza con más de 7.000 asientos donde disfrutar de la mejor cerveza de Múnich.
Pero si prefieres aprovechar para degustar la mejor cocina bávara, reserva una mesa en el restaurante del lago Kleinhesseloher.
Al ser tan extenso hay muchas entradas a Englischer Garten.
La línea U6 de metro discurre paralela, por lo que hay hasta 7 estaciones en los alrededores de los jardines.
Westpark
Ubicado al sudoeste de la ciudad, Westpark es el tercer parque público más importante de Múnich.
Los jardines se crearon como parte de la Exposición Internacional de Horticultura de 1983
Se construyeron valles, colinas y lagos artificiales para recrear los paisajes alpinos.
Este jardín es especial por la gran variedad de ecosistemas del planeta que han logrado recrear, hay un jardín chino, japonés, tailandés, nepalí, francés o inglés.
También es imprescindible visitar el Jardín de las Rosas, cuenta con más de 20.000 ejemplares de esta bella flor.
Se llega desde la estación Westpark, por donde pasa la línea U6 de metro y 133 de autobús.