Historia de La Habana resumida
¿Estás pensando visitar la capital de Cuba? Descubre los episodios más relevantes de la historia de La Habana, aquellos que han modelado una de las ciudades más singulares del mundo.
Desde sus orígenes indígenas, pasando por la colonización y lucha por la independencia, hasta llegar a la revolución y sus consecuencias, aquí te contamos la historia de La Habana resumida.
Orígenes indígenas
Los orígenes de La Habana se remontan a la era precolombina, cuando la región estaba habitada por grupos de taínos y arawak.
Estas tribus, conocidas por su cultura agrícola y su habilidad para la caza y la pesca, establecieron asentamientos en la isla de Cuba y otras partes del Caribe.
Los indígenas vivían en aldeas dispersas por toda la isla y subsistían principalmente de la agricultura, cultivando maíz, yuca y otros cultivos básicos.
También eran expertos en la fabricación de objetos de cerámica, cestería y herramientas de piedra.
¿Quién conquistó Cuba?
Cuando Cristóbal Colón llegó a Cuba el 27 de octubre de 1492, durante su primer viaje al Nuevo Mundo, encontró a los indígenas taínos viviendo en la isla.
En un primer momento recibió el nombre de Juana, en honor del príncipe Juan, aunque ya en sus primeras anotaciones Colón utilizaba el nombre de Cuba.
Esa denominación taína, que significa literalmente “tierra o terreno”, permaneció desde entonces como nombre oficial de la isla.
¿Cuándo se fundó la Ciudad de La Habana?
La Ciudad de La Habana se fundó oficialmente el 16 de noviembre de 1519, concretamente por el adelantado español Diego Velázquez de Cuéllar.
Nombrada como San Cristóbal de La Habana, fue la sexta villa fundada por los españoles en la isla de Cuba.
En la Plaza de Armas se celebró la primera misa y el primer cabildo, lugar donde actualmente se alza El Templete.
A partir de entonces comienza la historia documentada de La Habana, marcada por su ubicación estratégica como nexo entre América y España.
¿Por qué se llama La Habana?
El nombre «La Habana» tiene su origen en la lengua de los indígenas taínos, se cree que proviene de la palabra «Habaguanex».
Su significado vendría a ser «lugar de refugio» o «tierra de muchas aguas», ya que la geografía de la zona estaba marcada por ríos y bahías.
Los españoles adoptaron este nombre para referirse al asentamiento colonial que fundaron en 1519, conservando así la herencia lingüística de los pueblos originarios.
Fortificación de la ciudad
La fortificación fue un aspecto crucial en la historia de La Habana, especialmente debido a su ubicación estratégica en el Mar Caribe.
Ante la amenaza constante de ataques piratas y de otras potencias europeas, la ciudad se convirtió en un importante centro de defensa y comercio para el Imperio Español.
Durante el siglo XVI, las autoridades españolas comenzaron a construir fortificaciones en la bahía de La Habana para protegerla de los ataques navales.
Fortalezas como el Castillo del Morro y el Castillo de la Real Fuerza, fueron diseñadas para defender la ciudad y controlar el acceso al puerto.
Con el tiempo, La Habana se convirtió en una de las ciudades más fortificadas de América, lo que contribuyó a su importancia estratégica y a su desarrollo como centro colonial.
¿Cuál era la capital de Cuba antes de La Habana?
En un primer momento, la capital de Cuba se estableció en Santiago, ciudad fundada en 1515 en el extremo oriental de la isla.
Pero la importancia de La Habana fue tan grande en la primera mitad del siglo XVI, que el gobierno al completo se trasladó desde Santiago de Cuba.
Oficialmente, La Habana se convirtió en capital de Cuba en 1607, acogiendo hasta el día de hoy las principales instituciones políticas del país.
El título de ciudad le había sido concedido 1592, por real cédula del monarca Felipe II.
Ocupación británica
Durante el siglo XVIII, La Habana se convirtió en un objetivo estratégico para las potencias coloniales europeas, particularmente para Gran Bretaña.
Deseando controlar el comercio en el Mar Caribe, en 1762 las fuerzas británicas lanzaron un ataque sorpresa contra la ciudad.
Tras un largo asedio de dos meses, finalmente las autoridades cubanas cedieron el control de La Habana a los británicos.
Sin embargo, esta ocupación duró menos de un año, ya que, en 1763 se firmó el Tratado de París, por el que Gran Bretaña devolvía La Habana a España a cambio de Florida.
Después de esta incursión, quedó clara la insuficiencia de las antiguas fortalezas que guardaban la bahía.
Por ese motivo se construyó la Fortaleza de San Carlos de la Cabaña, la obra más cara financiada por la corona fuera de España.
Siglo de Oro en la historia de La Habana
El siglo XIX se considera el siglo de oro en la historia de La Habana, marcado por su importancia estratégica para el comercio entre América y Europa.
Para facilitar el transporte de mercancías claves para la economía de la isla, como eran el azúcar y el tabaco, se decidió construir un ferrocarril que unía La Habana con Güimes.
También se llevaron a cabo numerosas obras de transformación por toda la ciudad, embellecida con palacetes, teatros y edificios públicos que hoy forman parte de su encanto.
¿Cuándo se separó Cuba de España?
Paralelamente, se estaba gestando la semilla de la independencia entre los terratenientes cubanos.
Hartos de los impuestos y el férreo control de la Corona Española, durante el siglo XIX estallaron dos guerras de independencia.
En 1898, explota el acorazado Maine en el puerto de La Habana, dando pie a que entraran en la guerra los estadounidenses.
El 20 de mayo de 1902, España firma la independencia definitiva de Cuba, pero Estados Unidos pasó a controlar desde la sombra al gobierno de la isla.
A partir de entonces, La Habana se convirtió en Las Vegas del Caribe, plagada de lujosos hoteles y casinos.
Revolución cubana
Durante la primera mitad del siglo XX, Cuba estuvo gobernada por mandatarios títeres al servicio de los Estados Unidos.
El último de ellos fue Fulgencio Batista, derrocado el 1 de enero de 1959 por el movimiento revolucionario liderado por Fidel Castro.
Castro asumió el poder y comenzó a implementar una serie de reformas políticas, económicas y sociales, incluida la nacionalización de empresas y la redistribución de tierras.
Estas reformas llevaron a tensiones con Estados Unidos, y, eventualmente, a un embargo económico impuesto por el gobierno estadounidense.
La isla se convirtió en un estado socialista y estableció estrechos vínculos con la Unión Soviética, lo que desembocó en la crisis de los misiles en 1962.
Con la disolución de la Unión Soviética en 1991, comenzó en Cuba una etapa denominada Período Especial, marcada por la escasez de los productos más básicos.
Actualidad
A partir de la década de los noventa, Cuba se volcó con el turismo, siendo desde entonces la principal fuente de ingresos del país.
En 1976, el gobierno cubano declaró el centro histórico como Monumento Nacional, llevando a cabo en los últimos años la reconstrucción de sus principales monumentos.
Por su parte, la Unesco lo nombró Patrimonio de la Humanidad en 1982, reconociendo el encanto colonial único de la ciudad.
En diciembre del 2014, La Habana fue incluida como una de las Siete Ciudades Maravillas del Mundo.
Durante el gobierno de Barack Obama, se produjo un cambio drástico en las relaciones entre Cuba y Estados Unidos, dándole un fuerte impulso al turismo.
Pero la llegada de Trump al poder, y posteriormente el estallido de la pandemia de Covid, han traído a Cuba una fuerte crisis económica que se deja sentir incluso en el sector turístico.
