Monumentos de Varsovia
Además de los museos, edificios civiles y religiosos, a través de los monumentos de Varsovia se puede profundizar en la historia de la ciudad.
Monumento al Alzamiento de Varsovia
Frente a la Catedral de Campo del Ejército Polaco se ubica uno de los más singulares monumentos de Varsovia.
Homenajea el Alzamiento de Varsovia, acontecimiento histórico que se inició el 1 de agosto de 1944 para liberar a Polonia de la ocupación nazi.
El movimiento rebelde fracasó por la falta de apoyo de Rusia, pero la batalla se recuerda como una de más mortíferas de la Segunda Guerra Mundial.
Cuando finalmente capitularon el 2 de octubre de 1944, la mayoría de ciudadanos fueron enviados a campos de concentración y exterminio.
Por su parte los edificios y monumentos fueron arrasados con bombas y lanzallamas, se calcula que el 85% de Varsovia fue destruida.
Sobre una escalinata están representados los insurgentes del Alzamiento de Varsovia, mientras salen corriendo de entre los pilares de un puente derruido.
Más abajo se les ve entrando en los túneles del alcantarillado, a su lado un sacerdote observa la imagen sobrecogido.
Justo enfrente está la Catedral de Campo del Ejército Polaco, iglesia donde los rebeldes polacos hicieron el juramento antes de partir a la batalla donde muchos perdieron la vida.
Al Monumento al Alzamiento de Varsovia se llega desde la estación Muranów, donde tienen parada las líneas 15, 18, 35 y 36 de tranvía.
Monumento a la Sirenita
Dominando la Plaza del Mercado está el Monumento a la Sirenita, uno de los más conocidos y fotografiados de Varsovia.
Se dice que es hermana de la famosa Sirenita de Copenhague, aunque ésta descansa plácidamente sobre una roca y la Sirenita de Varsovia empuña un escudo y una espada para defender la ciudad.
La leyenda cuenta que un ser mitológico llamado Sawa, vino nadando desde el mar y remontó el río Vístula.
Cuando llegó al actual Barrio Viejo salió del agua para descansar, cautivada por su belleza se quedó allí a vivir para siempre.
Los pescadores de la zona contaban que alguien agitaba las aguas y soltaba a los peces de la redes, muchas veces intentaron atraparla, pero la sirena siempre conseguía hipnotizarlos con su canto.
Un comerciante escuchó la historia e ideó una artimaña para atraparla, se tapó lo oídos y consiguió encerrarla en una jaula de madera.
Una noche un joven pescador llamado Wars escuchó su llanto, se apiadó de ella y la liberó.
La sirena en agradecimiento les prometió que siempre acudiría en defensa de la ciudad.
Wars y Sawa se casaron, de ahí se dice que viene el nombre de Varsovia, en polaco Warszawa.
Hay otras dos estatuas de sirenas en la ciudad, una a orillas del río Vístula y otra en la calle Karowa.
Se puede llegar desde la estación Stare Miasto, donde tienen parada las líneas 13, 23, 26 y 32 de tranvía.
Monumento a Frederic Chopin
Situado a la entrada del Parque Real Lazienki, es la escultura más famosa del músico y compositor polaco.
Además, se ha convertido en uno de los monumentos de Varsovia más fotografiados y visitados.
Fue diseñado por el escultor Waclaw Szymanowski a comienzos del siglo XX, con motivo del centenario del nacimiento de Chopin en 1910.
Algunas controversias con el proyecto retrasaron su inauguración hasta 1926.
Se trata de una escultura modernista donde se puede ver a Chopin sentado bajo un sauce azotado por el viento.
A sus pies hay un estanque circular.
Durante los fines de semana de los meses de verano, los mejores pianistas del mundo interpretan sus obras junto al monumento.
Al Parque Real Lazienki se llega desde la estación Pl.Unii Lubelskiej, por donde pasan las líneas 18, 19 y 36.
Monumento a los Héroes del Gueto
Está ubicado junto al Museo de la Historia de los Judíos Polacos, en el antiguo Barrio Judío.
Fue construido para honrar a los caídos durante el Alzamiento del Gueto de Varsovia, ocurrido en 1943.
El Gueto de Varsovia fue el más grande de la Segunda Guerra Mundial, el alzamiento se gestó ante la deportación masiva hacia campos de exterminio.
Se calcula que unos 13.000 judíos murieron en el levantamiento fallido, el resto fueron enviados al Campo de Exterminio de Treblinka.
El Monumento a los Héroes del Gueto está dividido en dos partes.
La primera fue inaugurada el 16 de abril de 1946, a su vez está dividida en dos secciones.
Por un lado hay una placa redondeada con la inscripción: «Los que cayeron en la heroica lucha sin precedentes, por la dignidad y la libertad del pueblo judío, por una Polonia libre, por la liberación del hombre – Judíos polacos».
Está rodeada por un borde de piedra rojiza que representa la sangre derramada.
La otra sección también es una placa redondeada, en ella se puede ver una hoja de palma y una letra B hechas de metal.
La primera es un símbolo del martirio hebreo y la segunda viene de la palabra Bereshit, la primera palabra de la Torá, libro sagrado del judaísmo.
El segundo monumento fue inaugurado el 19 de abril de 1948, con motivo del quinto aniversario del alzamiento.
Es un gran bloque de piedra de algo más de 10 metros de altura con forma trapezoidal.
En el lado oeste hay un bajorrelieve que representa un grupo de combatientes judíos, se titula «La Lucha».
En el otro lado se representa el sufrimiento del pueblo judío mientras era conducido a los campos de exterminio, su título es «Camino al exterminio».
A los pies hay una placa que reza: «Del pueblo judío a sus combatientes y mártires».
A ambos lados hay sendas menorah de bronce, uno de los símbolos más antiguos del judaísmo.
Al Monumento a los Héroes del Gueto se llega desde la estación Muranów, donde tienen parada las líneas 15, 18, 35 y 36 de tranvía.