Ubicado a unos 10 kilómetros del centro de Colombo, el Templo de Kelaniya uno de los santuarios budistas más importantes de Sri Lanka.
Oficialmente su nombre es Kelaniya Raja Maha Vihara.
Historia
No se sabe con exactitud la fecha de su construcción, pero sí que fue visitado por Buda ocho años después de obtener la iluminación.
Se trataba de la tercera visita de Buda a Ceilán, hecho que ocurrió en el año 500 a. C.
Esta vez fue invitado por el rey Maniakkhikha, con el objetivo de predicar el Dhamma en compañía de 500 monjes.
Desde entonces se ha considerado que la historia de Sri Lanka ha estado ligada a la suerte del Templo de Kelaniya.
Cuando era destruido, el país sufría calamidades. Cuando era reconstruido, el país mejoraba.
Gran parte del conjunto de edificios fueron destruidos durante la ocupación de Portugal, en el siglo XVI.
Hubo que esperar hasta el siglo XVIII para que el rey Kirthi Sri Rajasingha encargara su reconstrucción.
Características
El elemento más destacado es la enorme estupa blanca que se alza en medio del patio.
Fue construida en el lugar exacto donde Buda dio su sermón, sobre un trono lleno de gemas disputado por dos reyes.
Después de oír sus doctrinas, los monarcas firmaron una paz duradera.
A su lado hay un árbol Bodhi, todo un símbolo del budismo.
Ya en el interior del edificio principal se puede ver una enorme estatua de Buda reclinado.
Finalmente cabe destacar los bellos murales que decoran el Templo de Kelaniya.
Añadidos en la primera mitad del siglo XX, cuentan la historia y desarrollo del budismo en Sri Lanka.
Duruthu Perahera
Desde 1927 se lleva a cabo la Procesión de Kelani, llamada oficialmente Duruthu Perahera.
Tiene lugar todos los años, el día anterior a la luna llena del mes de enero.
Se cuentan por miles los fieles y curiosos que acuden a la Procesión de Kelani, un auténtico espectáculo para todos los sentidos.
