Después de disfrutar de las vacaciones de verano, apetece hacer alguna escapada para disfrutar del otoño cerca de Madrid.
Por eso aquí os traemos 10 planes para disfrutar del otoño cerca de Madrid, con actividades para hacer en pareja, con amigos o en familia con los niños.
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Aranjuez
Al sur de Madrid se ubica el Real Sitio y Villa de Aranjuez, declarado Paisaje Cultural por la Unesco.
Del conjunto patrimonial destaca el Palacio Real, el Museo de Falúas Reales o la Casa del Labrador, pero en otoño sobre todo llaman la atención sus jardines.
Tres preciosos jardines rodean el Palacio Real de Aranjuez, el Jardín del Parterre, el Jardín de las Estatuas y el Jardín de la Isla.
El Jardín de la Isla es el mejor de ellos para visitar en otoño, ya que posee una exuberante vegetación que se torna rojiza y tiñe de colorido las fuentes y estatuas de alrededor.
Pero sin duda el más importante es el Jardín del Príncipe, no dejes pasar la oportunidad de recorrer el Estanque Chinesco, el Embarcadero Real o la Montaña Rusa a la sombra de los frondosos árboles.
Tienes varias opciones para disfrutar de Aranjuez por tu cuenta, dando un paseo en barco o haciendo un tour por el Palacio Real.
Y si buscas más atracciones en la zona, puedes aprovechar para visitar Chinchón, Colmenar de Oreja u Ocaña.
Real Sitio de San Ildefonso
Aunque está ubicado en la provincia de Segovia, su cercanía a Madrid lo convierte en una visita ideal para el otoño.
Al igual que en el caso de Aranjuez, La Granja de San Ildefonso cuenta con un Palacio Real rodeado de enormes jardines, de especial belleza cuando caen las primeras hojas de otoño.
No te pierdas las fuentes monumentales, el estanque de El Mar, el Laberinto o el Jardín de la Real Botica, pero sobre todo atrévete a perderte por sus intrincados senderos.
En los alrededores puedes visitar también el Palacio de Riofrío, Segovia, Pedraza o Turégano.
Bosque de La Herrería
Mundialmente famoso es el Monasterio de El Escorial, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Pero, ¿sabías que a su alrededor se extiende el precioso Bosque de La Herrería?
Integrado sobre todo por robles, castaños y fresnos, puedes buscar entres ellos varios árboles singulares de la Comunidad de Madrid:
- Arce de la Silla de Felipe II
- Tilo de la Mano
- Castaños de las Machotas
Uno de los puntos más interesantes del Bosque de La Herrería es la Silla de Felipe II, con inmejorables vistas al Monasterio de El Escorial.
Se trata de un conjunto de plataformas excavadas en piedra que se dice fueron construidas para que Felipe II pudiera observar su magnífica obra, pero la realidad es que se trata de altares prerromanos.
Desde aquí parten algunas sendas ecológicas que se adentran en el bosque, declarado Paraje Pintoresco, Lugar de Interés Comunitario y Zona de Especial Protección para Aves.
Hayedo de Montejo
No hay mejor plan para disfrutar de los colores del otoño en Madrid que visitar el Hayedo de Montejo, ubicado en plena Sierra del Rincón.
Es el único hayedo que se conserva en la Comunidad de Madrid.
Por eso está especialmente cuidado y vigilado, siendo únicamente accesible mediante visitas guiadas.
Para poder visitarlo en otoño hay que reservar con bastante antelación.
Aunque también tienes la opción de pegarte un buen madrugón para optar a alguna de las entradas que reparten a primera hora de la mañana.
Hay tres rutas disponibles, con diferentes niveles de dificultad:
- Ruta del Río, dificultad baja.
- Senda de la Ladera, dificultad media.
- Senda del Mirador, dificultad alta.
Ya que estás por la Sierra del Rincón, aprovecha para visitar La Hiruela y de camino también Buitrago del Lozoya.
Hayedo de Tejera Negra
Si te has quedado sin plaza para el Hayedo de Montejo, puedes optar por cambiar de provincia para visitar el Hayedo de Tejera Negra.
Está integrado dentro del Parque Natural de la Sierra Norte de Guadalajara.
El bosque de hayas se extiende por más de 400 hectáreas, también hay melojos, pino silvestre, tejos y acebos ya abedules.
Dos rutas circulares permiten conocer todo el espacio natural: la Senda de Carretas y la Senda del Robledal.
Si aprovechas el otoño, además de la explosión de colores, en el suelo hay un gran número de setas.
Lo malo es que es la época de mayor afluencia, siendo necesario reservar plaza en el aparcamiento del Centro de Interpretación.
Son 2€ por las motos, 4€ por los coches y 7€ por las autocaravanas.
Por el camino puedes aprovechar para descubrir algunos de los pueblos de la Ruta de la Arquitectura Negra de Guadalajara.
Barranco del Río Dulce
Seguimos en la provincia de Guadalajara para adentrarnos en el Barranco del Río Dulce, declarado LIC y ZEPA.
Era uno de los lugares favoritos de Félix Rodríguez de la Fuente para divisar aves, especialmente buitres, águilas y halcones.
Siempre es un buen momento para visitar el parque natural, pero el otoño saca a relucir sus mejores colores.
Se puede disfrutar a vista de pájaro desde el Mirador de Félix Rodríguez de la Fuente o a ras de suelo desde las rutas de senderismo.
Muy cerca se encuentra Sigüenza, una de las localidades con más encanto de la provincia de Guadalajara.
Hayedo de la Pedrosa
Y desde Guadalajara volvemos a la provincia de Segovia, para visitar el Hayedo de la Pedrosa.
Aunque no es tan famoso como los dos hayedos anteriores, su belleza en otoño es indiscutible.
Incluido en la Red Natura 2000, cuenta con casi 90 kilómetros cuadrados de bosques de hayas de libre acceso.
Por la zona se encuentra el Puerto de la Quesera, Riaza y el Parque Natural de las Hoces del Río Riaza.
Hoces del Duratón
Otro parque natural de Segovia que se viste de gala en otoño es el de las Hoces del Río Duratón, ubicado en las cercanías de Sepúlveda.
Al contrario que otros muchos espacios naturales que se tiñen de rojos, naranjas y ocres, en las laderas del río Duratón el protagonista es el amarillo.
Esto es de debido a los álamos, olmos, fresnos, sauces o alisos que conforman el bosque de ribera.
Aunque por supuesto los reyes indiscutibles del Parque Natural de las Hoces del Duratón son los buitres leonados, con más de 500 parejas censadas.
Dentro del patrimonio monumental destaca la Ermita de San Frutos, ubicada al borde de un meandro del río Duratón.
Además de las diferentes rutas de senderismo, puedes animarte a hacer piragüismo por las tranquilas aguas del río.
Castañar del Tiemblo
Otra provincia limítrofe con Madrid es Ávila, donde se ubica el Castañar del Tiemblo, con sus retorcidas formas y su impresionante colorido otoñal.
Ubicado dentro del Valle Natural de la Reserva de Iruelas, la zona ha sido declarada LIC y ZEPA.
Una ruta circular te llevará a través de los principales puntos de interés, como el castaño el Abuelo, con más de 500 años de vida y casi 20 metros de altura.
Así como la Garganta de la Yedra, pasando antes por unas tranquilas praderas donde se puede hacer un alto en el camino para reponer fuerzas.
Desde octubre a diciembre hay que abonar una entrada, 6€ por coche y 2€ por persona.
Muy cerca se puede visitar El Tiemblo, los Toros de Guisando o el Monasterio de los Jerónimos.
Mejores parques de Madrid
No hace falta hacer muchos kilómetros para disfrutar del otoño cerca de Madrid.
En la propia ciudad hay varios parques que lucen espectaculares teñidos de amarillos, ocres y rojos.
- Parque del Retiro, el pulmón verde de la capital cuenta con más de 15.000 árboles, incluyendo 6 árboles singulares.
- Casa de Campo, con sus más de 1.700 hectáreas, es el parque público más grande de Madrid.
- Real Jardín Botánico, situado junto al Museo del Prado, cuenta con más de 5.000 especies de plantas.
- Parque del Oeste, además del Templo de Debod, no te pierdas el Teleférico de Madrid o el Jardín de la Rosaleda.
- Jardines de Sabatini, situados junto a la fachada norte del Palacio Real, son famosos por los espectaculares atardeceres que ofrecen.
- Campo del Moro, desde sus extensos jardines de estilo inglés se obtiene una de las mejores imágenes del Palacio Real.
- Parque Madrid Río, extendiéndose a lo largo de 7 kilómetros paralelo al río Manzanares, se ha convertido en el lugar favorito de los madrileños para el ocio y los deportes.
- Quinta de los Molinos, aunque es más famoso en primavera por el florecimiento de los almendros, también merece una visita en otoño.
- Parque de Berlín, ubicado en el barrio de Ciudad Jardín, tiene una fuente dedicada a la caída del Muro de Berlín.
- Parque Juan Carlos I, cuenta con un olivar con más de 2.000 ejemplares, está cercano al IFEMA.
