Principales rascacielos de Londres
Además de todos los edificios históricos, los rascacielos de Londres forman parte de la imagen más actual de la ciudad.
The Shard
Situado muy cerca del Puente de Londres (London Bridge), también es conocido como Shard London Bridge.
De momento es el último gran rascacielos de Londres, además, con sus 310 metros de altura es el más alto del Reino Unido.
Construcción
Su construcción se llevó a cabo entre los años 2009 y 2012, sobre los terrenos de un antiguo rascacielos derribado en el 2006.
Las autoridades londinenses quieren que sea un símbolo del esfuerzo por salir del estancamiento y volver a la senda del crecimiento.
Su planta es triangular, la estructura está recubierta completamente por cristal que refleja la luz del sol.
Del diseño se encargó el prestigioso arquitecto italiano Renzo Piano, teniendo siempre en mente la eficiencia energética.
La inauguración oficial se celebró en julio del 2012, aunque el mirador y la terraza no se abrieron hasta febrero del 2013.
The View from The Shard
En su interior alberga viviendas de lujo, oficinas, un hotel, un balneario y en la planta más alta un mirador que es su mayor atractivo.
Está ubicado entre los pisos 68, 69 y 72, a 244 metros de altura, prácticamente el doble que las atracciones más altas de Londres.
Desde la recepción parten dos ascensores que llevan en cuestión de segundos en la cima de Londres, en la planta más alta hay una terraza al aire libre.
Y en los meses de verano puedes disfrutar de The Summer Garden, el jardín más alto de Londres.
El horario del mirador y la terraza del Shard London Bridge es:
- Desde abril a octubre, de 10:00 a 22:00 horas.
- Resto del año, de domingo a miércoles de 10:00 a 19:00 horas y de jueves a sábado de 10:00 a 22:00 horas.
El 25 de diciembre es el único día del año que permanece cerrado.
La entrada se puede adquirir en el propio edificio o por internet, obteniendo descuentos por reservas con más de 24 horas de antelación.
También hay descuentos para el pase familiar, que además incluye una garantía de buen tiempo.
Para llegar hasta The Shard la estación de metro más cercana es la de London Bridge, por donde pasan las líneas Jubilee y Northern.
En autobús las líneas con parada más cerca son: 43, 343, 381, N47, N381 y RV1.
Para los que prefieran llegar en barco, el embarcadero más cercano es el de London Bridge City Pier.
30 St Mary Axe
A pesar de no ser el más alto de los rascacielos de Londres, su imagen es una de las más emblemáticas de la ciudad.
El edificio 30 St Mary Axe es llamado así por su ubicación en esa dirección, en pleno corazón de la city londinense.
Aunque por su forma, es más conocido popularmente como «el pepinillo» o «the gherkin» en inglés.
Construcción
Se trata de un rascacielos de 40 plantas que se alza hasta los 180 metros, siendo el decimosexto edificio más alto de Londres.
Fue construido en los primeros años del siglo XXI, la inauguración oficial se celebró el 25 de mayo del 2004.
El ingenioso diseño es del arquitecto Norman Foster, aunque la edificación estuvo a cargo de una empresa sueca.
Su forma, además de aportar modernidad, fue pensada para ayudar al ahorro energético.
Como curiosidad, únicamente hay una pieza de cristal curvilínea en todo el edificio.
Se alza en los terrenos que antes ocupaba el edificio de la compañía naviera Baltic Exchange, demolido tras una bomba colocada por el IRA en 1992.
Interior
Al interior del edificio 30 St Mary Axe no es posible acceder, a no ser que se trabaje en alguna de sus oficinas.
Es una lástima, ya que guarda un mirador de 360 grados en el piso 40 y varios restaurantes panorámicos un piso más abajo.
Se puede llegar desde la estación de metro Aldgate, con las líneas Circle o Metropolitan.
Leadenhall Building
Lleva ese nombre por su ubicación, concretamente en el 122 Leadenhall Street.
Aunque es más conocido por los londinenses como «The Cheesegrater», en castellano «el rallador de queso».
Aunque estaban aprobados los permisos de construcción desde el 2004, las obras no empezaron hasta el 2011, debido a la crisis financiera.
Del diseño con forma de cuña se encargó el arquitecto Richard Rogers, su objetivo era proteger la visión hacia la Catedral de San Pablo.
Su altura es de 225 metros, siendo en el 2020 el quinto rascacielos más alto de Londres.
Una superestructura de acero proporciona estabilidad al conjunto, quedando visible entre el revestimiento de cristal.
La fachada está inclinada en un ángulo de 10º, por ese motivo el espacio útil se va reduciendo con la altura.
El interior está ocupado por completo por oficinas, principalmente de compañías de seguros.
20 Fenchurch Street
El último de los rascacielos de Londres, aunque no es más alto, es sin duda uno de los más singulares de la ciudad.
Apenas llega a los 160 metros, pero lo que llama la atención es su diseño cóncavo, lo que le ha valido el sobrenombre de «walkie-talkie».
Es obra del arquitecto uruguayo Rafael Viñoly, muy controvertida desde sus inicios.
A las preocupaciones iniciales por su impacto visual, se añadieron los problemas creados tras su construcción por su forma.
La parte cóncava del edificio de cristal hace de lupa, reflejando el sol y aumentando más de 20 grados la temperatura hacia el lugar donde apunta.
Popularmente conocidos como «rayos de la muerte», llegaron a derretir vehículos estacionados en los alrededores.
Para solucionarlo, el arquitecto diseñó un parasol que se extiende a lo largo de los 37 pisos.
Sky Garden
Sin duda el mayor atractivo turístico del edificio, ocupando las tres últimas plantas, es el jardín público más alto de Londres.
Es un jardín vertical repleto de plantas resistentes a la sequía, diseñado por la arquitectura paisajista Gillespies.
Además cuenta con sky bars y sky restaurants, aunque los precios son bastante elevados.
La entrada al Sky Garden es gratuita, pero hay que reservar con antelación para evitar aglomeraciones.
Heron Tower
Con sus 230 metros de altura, es el rascacielos más alto de la City de Londres.
Fue diseñado por la firma de arquitectura neoyorkina Kohn Pedersen Fox, aportando un moderno edificio de oficinas.
Las obras se alargaron entre el 2008 y el 2011, cuando se colocó el mástil de comunicación de 28 metros de altura.
En total tiene 46 pisos, en su mayoría ocupados por oficinas.
Pero en la planta baja cuenta con una galería cubierta, rodeada por tiendas, restaurantes y cafeterías.
El gran hall de entrada acoge un enorme acuario de 70.000 litros, entre sus más de 1.000 especies de peces incluye tiburones.
Por su parte entre los pisos 38 y 40 hay un sky bar y un restaurante panorámico, ambos de acceso libre para el público.
Aunque su precio es elevado, merece la pena probar la fusión de cocina brasileña y japonesa en el Sushi Samba.