Cómo moverse por Praga: Transporte público y turístico
Praga, la ciudad de las cien torres, es un destino que combina historia, cultura y modernidad. Sus calles adoquinadas, monumentos históricos y vibrante vida urbana, la convierten en un lugar perfecto para explorar.
Para disfrutar al máximo de todo lo que ofrece, es fundamental conocer las mejores opciones de transporte para moverse por Praga de forma cómoda y económica.

En esta guía encontrarás toda la información que necesitas sobre el transporte público de Praga: desde su eficiente red de metro, tranvías y autobuses urbanos, hasta alternativas como el funicular de Petřín.
Además, tienes un resumen de los principales medios de transporte turísticos, incluyendo tranvías, autobuses, paseos en barco por el río Moldava o alquiler de bicicletas.
Todos los precios están actualizados en 2025 para billetes sencillos, abonos de transporte y otros servicios, para que puedas planificar tu presupuesto con total tranquilidad.
Tanto si visitas Praga por unos días como si planeas una estancia más larga, aquí descubrirás las alternativas más prácticas y económicas para desplazarte y disfrutar de cada rincón de la ciudad.
Moverse por Praga en metro
El metro es uno de los sistemas de transporte más rápidos y cómodos para moverse por Praga, su eficiencia y cobertura lo convierten en una opción ideal tanto para residentes como para turistas.
El metro de Praga cuenta con tres líneas principales, cada una identificada por un color y una letra:
- Línea A (Verde): Conecta el oeste con el este de la ciudad. Es la línea más popular entre los turistas, ya que pasa por lugares clave como Malá Strana, Staroměstská (Ciudad Vieja) y Muzeum.
- Línea B (Amarilla): Recorre la ciudad de noreste a suroeste, conectando zonas residenciales con el centro. Pasa por estaciones importantes como Náměstí Republiky.
- Línea C (Roja): Cruza Praga de norte a sur, conectando áreas residenciales con el centro. Es útil para llegar a la estación central de trenes (Hlavní Nádraží) y Vyšehrad.
En total, el metro de Praga cuenta con 61 estaciones distribuidas en sus tres líneas, y todas están bien señalizadas tanto en checo como en inglés.
El horario de funcionamiento abarca desde las 5 de la mañana hasta la medianoche. Los fines de semana y festivos el horario se mantiene, pero con una leve reducción en la frecuencia de paso.
Durante las horas punta, los trenes circulan cada 2-3 minutos, mientras que en horarios menos concurridos la frecuencia es de 5-10 minutos. Esto garantiza un servicio rápido y constante a cualquier hora del día.
El metro de Praga está perfectamente integrado con el resto de los sistemas de transporte público, tanto tranvías y autobuses, como trenes de media y larga y distancia.
Muchas estaciones están equipadas con ascensores y escaleras mecánicas, facilitando el acceso a personas con movilidad reducida o familias con carritos de bebé.
Además, es un medio de transporte seguro, con buena iluminación y cámaras de vigilancia en estaciones y trenes.
Antes de acceder al andén, asegúrate de validar tu billete en las máquinas naranjas. El metro no tiene tornos de entrada, pero hay inspecciones frecuentes.

Moverse por Praga en tranvía
Es la forma más pintoresca de recorrer las históricas calles de Praga, incluso tienen un tranvía turístico para descubrir los principales sitios de interés en un vehículo histórico.
La red de tranvías de Praga se compone de 25 líneas diurnas, numeradas del 1 al 26, excluyendo el número 13, además de 9 líneas nocturnas, identificadas con números del 91 al 99.
A esto hay que sumar el tranvía número 41, conocido como el «tranvía nostálgico», opera durante los fines de semana y festivos, ofreciendo a los pasajeros una experiencia turística única a bordo de vehículos históricos.
Además de la ruta turística, el tranvía número 22 es especialmente popular entre los turistas, ya que su recorrido pasa por numerosos puntos de interés, incluyendo el Castillo de Praga y el barrio de Malá Strana.
El tranvía de Praga opera durante todo el día y la noche, la líneas diurnas desde las 4:30 horas hasta la medianoche, con frecuencias que varían entre 8 y 10 minutos durante las horas pico, y de 10 a 20 minutos en otros momentos.
A parte de la medianoche entran en funcionamiento las líneas nocturnas, con una frecuencia aproximada de 40 minutos.
Es importante destacar que las paradas de tranvía están bien señalizadas y proporcionan información detallada sobre los horarios y rutas.
Además, algunas paradas están marcadas con una «M», indicando conexión directa con el metro.
Moverse por Praga en autobús urbano
El sistema de autobuses urbanos de Praga complementa eficazmente la red de metro y tranvía, facilitando el acceso a zonas periféricas y áreas no cubiertas por otros medios de transporte.
Praga cuenta con una extensa red de autobuses que incluye tanto líneas diurnas como nocturnas. Las líneas diurnas operan con números que van del 100 al 291, mientras que las líneas nocturnas se identifican con números del 901 al 915.
Los autobuses diurnos operan aproximadamente desde las 4:30 hasta las 00:00 horas. Durante este periodo, la frecuencia de paso varía según la línea y la hora del día, siendo más frecuente en horas punta.
Por su parte, los autobuses nocturnos cubren el servicio desde la medianoche hasta las 4:30 horas, con intervalos de paso que oscilan entre 30 y 60 minutos. Estas líneas aseguran la movilidad durante las horas en que el metro y los tranvías no están operativos.
Las paradas de autobús en Praga están claramente señalizadas y cuentan con información sobre los horarios y rutas de cada línea.
Es importante verificar los horarios específicos de cada línea, ya que pueden variar según el día de la semana y la hora del día. Además, se recomienda estar atento a posibles cambios en las rutas debido a obras o eventos especiales.
En resumen, los autobuses urbanos ofrecen una excelente alternativa para moverse por Praga, con amplios horarios y una extensa red de líneas que abarcan un área más extensa que el metro y el tranvía.

Precio del transporte público de Praga
El sistema de transporte público de Praga es reconocido por su eficiencia y asequibilidad, ofreciendo diversas opciones de billetes y abonos que se adaptan a las necesidades de residentes y visitantes.
A continuación, se detallan las tarifas actualizadas para 2025:
Billetes sencillos
- Billete de 30 minutos: Permite viajes ilimitados en metro, tranvía y autobús dentro de los 30 minutos posteriores a su validación.
- Adultos (15-60 años): 30 CZK (aproximadamente 1,20 €).
- Personas mayores (60-70 años): 15 CZK (alrededor de 0,60 €).
- Niños (menores de 15 años) y mayores de 70 años: Viajan gratis.
- Billete de 90 minutos: Válido para viajes ilimitados en todos los medios de transporte durante 90 minutos desde su validación.
- Adultos (15-60 años): 40 CZK (aproximadamente 1,60 €).
- Personas mayores (60-70 años): 20 CZK (alrededor de 0,80 €).
- Niños (menores de 15 años) y mayores de 70 años: Viajan gratis.
Abonos de transporte
- Abono de 24 horas: Ofrece viajes ilimitados en metro, tranvía y autobús durante un día completo.
- Adultos (15-60 años): 120 CZK (aproximadamente 4,80 €).
- Personas mayores (60-70 años): 60 CZK (alrededor de 2,40 €).
- Niños (menores de 15 años) y mayores de 70 años: Viajan gratis.
- Abono de 72 horas: Ideal para estancias más largas, permite viajes ilimitados durante tres días consecutivos.
- Tarifa única: 330 CZK (aproximadamente 13,05 €).
Consideraciones adicionales
- Equipaje: Si viajas con equipaje voluminoso, es necesario adquirir un billete adicional de 20 CZK (alrededor de 0,80 €) por cada pieza.
- Puntos de venta: Los billetes y abonos pueden adquirirse en máquinas expendedoras ubicadas en estaciones de metro, quioscos, estancos, oficinas de información turística y, en algunos casos, a través de aplicaciones móviles.
- Validación: Es importante validar los billetes al inicio de cada viaje para evitar sanciones, su compra hay que hacerla siempre antes de subir al metro, tranvía o autobús.
El transporte público de Praga es una opción conveniente y económica para desplazarse por la ciudad, ofreciendo conexiones eficientes a los principales puntos de interés.
Funicular de Petřín
Una de las experiencias más singulares para moverse por Praga y disfrutar de sus vistas es subir al Funicular de Petřín.
Este histórico medio de transporte conecta el barrio de Malá Strana con la cima de la Colina de Petřín, donde se encuentran algunos de los rincones más encantadores de la ciudad.
Inaugurado en 1891 para la Exposición Jubilar, el funicular ha sido modernizado a lo largo de los años, pero sigue conservando su encanto original.
El trayecto parte desde la estación inferior de Újezd y tiene paradas en Nebozízek, un mirador intermedio perfecto para disfrutar de las vistas, y finaliza en la estación superior junto a la famosa Torre de Observación de Petřín, que ofrece panorámicas espectaculares de Praga.
El recorrido completo dura apenas 5 minutos, pero es una experiencia imprescindible tanto para locales como para visitantes.
Lo mejor de todo es que el Funicular de Petřín forma parte del sistema de transporte público de Praga, por lo que se puede utilizar con el mismo billete o abono de metro, tranvía y autobús.
El billete sencillo cuesta alrededor de 1,60€ (40 CZK) y está incluido en los abonos de transporte de 24 o 72 horas.
Además tiene un amplio horario de funcionamiento, desde las 9 de la mañana hasta las 20:45 horas en invierno y 23:20 horas en verano
Subir en el funicular no solo es cómodo, sino que también permite acceder de forma rápida a espacios verdes ideales para relajarse, como los Jardines de Petřín, el Laberinto de los Espejos y la Iglesia de San Lorenzo.
Es especialmente recomendable al atardecer, cuando la ciudad se tiñe de colores cálidos y las vistas se vuelven aún más mágicas.
ACTUALIZACIÓN: El Funicular de Petřín permanecerá cerrado a lo largo de 2025, debido a trabajos de reconstrucción de las vías y modernización del sistema.
Moverse por Praga en autobús turístico
Si tienes poco tiempo para descubrir la ciudad o prefieres recorrer Praga de forma cómoda y sin complicaciones, el autobús turístico es una opción ideal.
Este servicio te permite visitar los principales puntos de interés con total flexibilidad gracias a sus tres rutas diferenciadas: Ruta Roja, Ruta Azul y Ruta Lila.
Entre todas suman un total de 19 paradas estratégicamente ubicadas cerca de los monumentos más emblemáticos, como el Castillo de Praga, el Puente de Carlos o la Plaza de la Ciudad Vieja.
Una de las mayores ventajas de este servicio es su modalidad hop-on hop-off, que permite subir y bajar del autobús cuantas veces quieras durante la duración de tu billete.
De este modo, puedes recorrer la ciudad a tu propio ritmo, detenerte en las atracciones que más te interesen y continuar el recorrido cuando lo desees.
Los billetes están disponibles en dos modalidades:
- Billete de 24 horas: Cuesta 27,24€ para adultos, 19,71€ para los niños y 69,91€ para las familias.
- Billete de 48 horas: Cuesta 30,47€ para adultos, 25,09€ para los niños y 86,04€ para las familias.
Durante el recorrido, podrás disfrutar de una audioguía en varios idiomas que explica la historia y curiosidades de los lugares más importantes de Praga.
Además, los autobuses suelen incluir acceso a un crucero por el río Moldava, lo que completa la experiencia con vistas únicas de la ciudad desde el agua.
Optar por el autobús turístico en Praga es la alternativa perfecta para moverse por Praga y aprovechar al máximo tu visita, especialmente si viajas con niños o prefieres evitar largas caminatas.

Moverse por Praga en taxi
Moverse por Praga en taxi es una opción cómoda y rápida, especialmente si llevas equipaje o viajas de noche, cuando el transporte público es menos frecuente.
La ciudad cuenta con servicios de taxi tradicionales y opciones modernas a través de aplicaciones móviles, lo que facilita encontrar transporte en cualquier momento.
Los taxis oficiales en Praga tienen tarifas reguladas: la bajada de bandera son 60 CZK, a lo que hay que sumar un cargo de 36 CZK por kilómetro.
Aparte del taxi, aplicaciones como Bolt, Uber y Liftago son muy populares en Praga. Estas plataformas ofrecen precios más competitivos y permiten conocer la tarifa antes de iniciar el viaje.
Por ejemplo, un trayecto desde el centro de Praga hasta el Aeropuerto de Václav Havel puede costar entre 400 y 600 CZK con estas apps, dependiendo del tráfico y la demanda.
Para trayectos cortos dentro del centro histórico, los taxis no siempre son la opción más práctica debido a las calles peatonales y el tráfico.
Sin embargo, para viajes más largos o traslados nocturnos, el taxi sigue siendo una alternativa cómoda y segura para moverse por Praga.
Es recomendable confirmar que el taxi cuenta con taxímetro visible y que pertenece a una compañía reconocida, como AAA Radiotaxi o Tick Tack, para evitar cobros excesivos.
También es aconsejable llamar a una centralita para pedir un taxi, pregunta en ese momento el precio aproximado del trayecto.
Evita los taxis aparcados en las estaciones de tren o los principales sitios turísticos, ya que suelen cobrar hasta el triple de la tarifa oficial.
Comprueba el serigrafiado de las puertas delanteras, debe incluir el nombre de la empresa, número de licencia y tarifas.
Pregúntale al conductor el precio de la carrera, fíjate que ponga a cero el taxímetro y pídele el recibo.
Si ves algo raro, apunta el número de licencia para poder denunciarlo, este simple acto suele disuadirlos de timar al usuario.

Paseos en barco por el río Moldava
Explorar Praga desde las aguas del río Moldava es una de las formas más encantadoras y relajantes de conocer la ciudad.
Los paseos en barco permiten disfrutar de vistas panorámicas de monumentos icónicos como el Castillo de Praga, el Puente de Carlos y el Teatro Nacional, todo mientras se navega suavemente por el río.
Existen diversas opciones de cruceros para adaptarse a todos los gustos y presupuestos.
Los cruceros panorámicos de una hora son ideales para quienes buscan una experiencia breve pero memorable, con precios que rondan los 18€ para los adultos y 12€ para los niños.
Para una experiencia más completa, los cruceros con cena ofrecen un ambiente romántico con vistas iluminadas de la ciudad, acompañados de música en vivo y menús típicos checos, con tarifas desde 1.200 CZK.
Y una opción intermedia son los cruceros con comida, un poco más asequibles pero igualmente recomendables para descubrir la ciudad desde otro punto de vista.
También hay paseos temáticos como cruceros históricos narrados, perfectos para los amantes de la historia, o recorridos privados en barcos pequeños para quienes buscan una experiencia más exclusiva.
Un paseo en barco por Praga ofrece una perspectiva diferente de la ciudad, ideal para relajarse y admirar sus joyas arquitectónicas desde un ángulo único.
Moverse por Praga en bicicleta
Moverse por Praga en bicicleta es una opción cada vez más popular para explorar la ciudad de manera ecológica y eficiente.
La capital checa cuenta con una red creciente de carriles bici y rutas que conectan los principales puntos de interés, lo que facilita el desplazamiento seguro para ciclistas.
Praga ofrece diversas opciones para alquilar bicicletas, adaptándose a las necesidades de los visitantes.
Empresas como City Bike Prague proporcionan alquileres de bicicletas estándar y eléctricas, con tarifas que comienzan alrededor de 750 CZK por día.
Además, plataformas como ListNRide permiten reservar bicicletas de diferentes tipos y tamaños, ofreciendo flexibilidad en precios y duración del alquiler.
Para quienes deseen una experiencia guiada, existen múltiples tours en bicicleta que recorren los lugares más emblemáticos de Praga, además se puede elegir entre bicicleta eléctrica o estándar.
Estos recorridos suelen durar entre 2 y 3 horas y su precio empieza en 35€ por persona, son guiados por expertos locales que proporcionan información valiosa sobre la historia y cultura de la ciudad.
Aunque la infraestructura ciclista de Praga ha mejorado, es importante tener en cuenta que algunas áreas, especialmente en el casco antiguo, pueden tener calles adoquinadas y pendientes pronunciadas.
Se recomienda utilizar casco y chaleco reflectante, especialmente si se planea circular durante la noche.
Además, es aconsejable familiarizarse con las normas de tráfico locales y mantenerse siempre alerta a peatones y vehículos.
En resumen, moverse por Praga en bicicleta ofrece una perspectiva única de la ciudad, combinando ejercicio, sostenibilidad y la oportunidad de descubrir rincones encantadores a tu propio ritmo.