Cómo llegar a Santander
Para llegar a Santander desde otros países o regiones de España dispones de varias opciones: avión, tren, autobús o transporte particular.
Dependiendo del lugar de origen y el presupuesto disponible, puede ser más interesante una alternativa u otra.
Los precios aquí mostrados están actualizados a fecha julio del 2022.
Viajar en avión a Santander
Santander cuenta con el Aeropuerto Seve Ballesteros, ubicado en el cercano municipio de Camargo.
Hasta él llegan principalmente líneas aéreas de bajo coste, como Ryanair, Vueling, Air Nostrum o Volotea.
Hasta Santander llegan vuelos nacionales desde Madrid, Barcelona, Alicante, Valencia, Murcia, Málaga, Sevilla, Islas Canarias e Islas Baleares.
Pero también vuelos internacionales, desde París, Londres, Bruselas, Roma, Venecia, Dublín, Berlín, Frankfurt o Edimburgo.
Hay que tener en cuenta que algunos de estos vuelos son estacionales, es decir, que sólo operan en temporada de vacaciones.
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Para llegar desde el Aeropuerto de Santander al centro hay una ruta de autobús gestionada por Alsa, línea S4, su precio es de 2,90€ por trayecto.
Por supuesto también se puede optar por el taxi o traslados privados, en ambos casos ronda los 30€.
Llegar a Santander en tren
Otro medio de transporte público utilizado para llegar a Santander son los trenes de media y larga distancia, gestionados por Renfe.
Directamente hasta la capital de Cantabria llegan trenes desde Madrid, Palencia, Valladolid y Alicante.
Pero también líneas de cercanías que conectan con poblaciones cercanas, la mayoría de ellas operadas por la antigua FEVE.
- Línea C1: Santander-Reinosa, pasando por Torrelavega.
- Línea C2: Santander-Cabezón de la Sal.
- Línea C3: Santander-Liérganes.
- Línea R2: Santander-Oviedo
- Línea R3: Santander-Bilbao.
La Estación de Trenes de Santander está ubicada en pleno centro de la ciudad, muy cercana al Paseo de Pereda.
Llegar a Santander en autobús
Junto a la estación de trenes está la de autobuses, otro medio de transporte disponible para viajar a Santander.
La compañía Alsa se encarga de gestionar las rutas desde Madrid, Bilbao, Oviedo, Burgos, San Sebastián, Valladolid o Zaragoza.
También tiene alguna línea regional, pero de las rutas dentro de Cantabria se encarga principalmente La Cantábrica.
Llegar a Santander en barco
Aunque Santander no es el destino por excelencia de cruceros, sí lo es de los ferris llegados desde el Reino Unido.
Concretamente hay tres rutas disponibles, todas con travesías que superan las 20 horas de navegación.
- Cork-Santander: dos veces por semana.
- Portsmouth-Santander: tres veces por semana.
- Plymouth-Santander: dos veces por semana.
La Terminal de Pasajeros de Santander está en pleno centro, junto a los Jardines de Pereda.
Mucho más utilizados son Los Reginas, míticas embarcaciones que unen Santander con Somo y Pedreña.
La misma compañía se encarga de ofrecer paseos en barco por la bahía, una forma diferente de disfrutar de la ciudad.
Viajar en coche a Cantabria
Para tener la libertad de recorrer Cantabria a tu aire, no hay nada mejor que el transporte particular.
Por los alrededores de la capital pasan dos importantes autovías:
- A-8 o Autovía del Cantábrico: se extiende paralela al Cantábrico, por lo que conecta todo el norte del país.
- A-67 o Autovía de la Meseta: con conexión directa desde Palencia.
Además la ciudad cuenta con tres autovías de acceso, la S-10 por el sur, la S-20 por el norte y la S-30 que la rodea.
Sin olvidar las dos carreteras nacionales que discurren hacia el sur, la N-611 por Palencia y la N-631 por Burgos.
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Aparcamiento en Santander
El principal problema de viajar en coche a Santander quizás sea el aparcamiento, sobre todo si queremos que sea gratis.
Hay varias zonas cercanas al centro que todavía cuentan con aparcamiento gratuito:
- Barrio Pesquero
- Aparcamiento Público Calle Alta
- Museo Marítimo
- Playa del Camello
- Estadio del Racing
El resto de calles del casco histórico son zona azul (OLA), con una estancia máxima de dos horas.
Pero si vas en fin de semana no hay problema, no funciona los sábados por la tarde, domingos, ni festivos.