A diferencia del resto de islas de la laguna, Torcello no fue habitada en el 452 por los ciudadanos de tierra firme que huían de las invasiones bárbaras.

En su caso ya existían asentamientos desde los primeros años del Imperio Romano, por eso se considera la isla más antigua habitada.

Durante siglos fue una de las islas más habitadas de la República Serenísima, pero actualmente sólo hay censados 11 residentes.

La mayoría de ciudadanos abandonaron la isla cuando quedó rodeada de pantanos, imposibilitando la navegación y trayendo epidemias.

Qué ver en Torcello

Por su gran antigüedad, el principal atractivo turístico de Torcello reside en su patrimonio histórico.

El edificio más emblemático es la Basílica de Santa María de la Asunción, uno de los edificios religiosos más antiguos del Véneto.

Fue fundada en el año 639, su estilo es románico pero en su interior acoge una gran cantidad de arte bizantino de los siglos XI y XII.

Su torre campanario es un símbolo de la parte norte de la Laguna de Venecia.

Otros puntos de interés son:

• Iglesia de Santa Fosca, uno de los mejores ejemplos del bizantino veneciano.
• Museo Provincial de Torcello, espacio donde se cuenta el origen de la Laguna Véneta, alojado entre el Palazzo dell’Archivio y el Palazzo del Consiglio.
• Puente del Diablo, aún conserva el estilo característico de los puentes venecianos sin barandillas.
• Trono de Atila, enorme asiento de piedra que la leyenda dice fue usado por el rey de los hunos.

Cómo llegar

Hasta Torcello se puede llegar con la línea 12 de vaporetto, partiendo desde la parada Fondamente Nove.

Hay que hacer escala primero en Burano, momento ideal para aprovechar y visitar también esa colorida isla.

Otra opción es contratar un visita guiada con transporte desde Venecia, incluyendo también la visita a Murano y Burano.