Mirador del Castillo de San Jorge

El Castillo de San Jorge, además de ser uno de los monumentos más visitados de Lisboa, ofrece vistas de lujo del casco histórico.

Esto es gracias a su ubicación sobre la colina más alta de la ciudad, de la cual toma su nombre.

Sólo debes tener en cuenta una cosa, para acceder al mirador hay que pagar la entrada al castillo.

Mirador de Gracia

Oficialmente recibe el nombre de Mirador de Sophia de Mello Breyner Andresen,

Su ubicación muy cerca del Castillo de San Jorge permite disfrutar prácticamente de las mismas vistas, pero gratuitamente.

Además, cuenta con el atractivo extra de poder ver la figura de la fortaleza dominando el casco urbano.

Mirador de la Señora del Monte

Está localizado junto a la ermita del mismo nombre, en uno de los puntos más altos de la ciudad.

Desde allí se divisan todos los edificios emblemáticos y el entramado de casitas que discurren por las colinas de Lisboa.

Mirador de Santa Justa

Sin duda uno de los más famosos miradores de Lisboa, por tener el Elevador de Santa Justa para llegar a lo alto de la colina.

Está ubicado cerca del Convento do Carmo, ruinas de la única iglesia gótica que se conserva tras el terremoto de 1755.

El elevador fue construido en 1902 siguiendo un estilo neogótico, alzándose hasta una altura de 45 metros.

Es el único ascensor vertical público de Lisboa, el resto son funiculares.

Mirador Puerta del Sol

Situado cerca de la Iglesia de Santa Lucía, es uno de los más visitados porque ofrece las mejores vistas del barrio Alfama.

No hay que mejor postal de Lisboa que la de las casas arremolinadas sobre una colina descendiendo hasta la orilla del río Tajo.

Cuenta con una estatua de San Vicente Mártir, santo patrón de la ciudad.

Mirador de Santa Lucía

Ubicado muy cerca del anterior, es conocido por el porche decorado con azulejos y el techo cubierto de parras durante el verano.

Es ideal para sentarse tranquilamente a disfrutar de las vistas, por lo que es uno de los más concurridos.

Mirador de Torel

Hasta él llega el Elevador do Lavra, histórico funicular que ha sido declarado Patrimonio Nacional.

Su mayor encanto es el jardín romántico que hay a su alrededor y la tranquilidad de no ser de los más concurridos.

Mirador de San Pedro de Alcántara

Ubicado en los alto del Barrio Alto, se accede con el Elevador da Glória.

Ofrece vistas hacia la Colina de San Jorge, con el caserío extendiéndose a sus pies.

Sin duda, es el mirador de Lisboa más famoso y visitado.

Mirador de Santa Catalina

Último de los miradores accesible a través de los funiculares, en éste caso con el Elevador da Bica.

Es recomendable visitar el mirador al atardecer, ya que se llena de ambiente, buen rollo y música.

Su símbolo es la estatua de Adamastor, personaje mitológico que se enfrenta a Vasco de Gama para que no llegue al Océano Índico.

Las vistas son hacia el puerto de Lisboa, más industrial pero igualmente curioso.

Mirador del Parque Eduardo VII

Llama la atención porque se puede ver todo el verdor del parque, extendiéndose bajo nuestros pies hasta la Plaza del Marqués de Pombal.

Miradores de Belém

En el barrio de Belém hay dos miradores interesantes, el mirador de la Torre de Belém y el del Monumento a los Descubrimientos.

Aunque no están ubicados sobre las colinas también son famosas las vistas que ofrecen del barrio y el río Tajo.

Mirador del Cristo Rey

Está ubicado en la freguesía Cacilhas, al otro lado del Tajo.

Ofrece unas estupendas vistas del río, el Puente 25 de Abril y la ciudad de Lisboa en todo su esplendor.